Ensaladera torneada de barro rojo, con una cubierta de blanco brillo por volcado y decoración sobrecubierta de azula alfarero a esponja. Para ello se ha mojado una esponja ancha con el esmalte elegido y se ha ido aplicando suavemente, marcando la textura de la misma; es importante no empaparla mucho, ya que saturaría el poro y podría chorrear. Por supuesto, si queremos usar la pieza para comida hay que elegir esmaltes aptos para alimentos.