
Prueba de esmaltes, en este caso óxido de cobre y rosa P mezclados con transparente NS-20 en distintas proporciones. Una vez empezamos a esmaltar, es imprescindible hacer este tipo de pruebas, ya que como sabéis las reacciones químicas que se producen en el horno cambian por completo el color de nuestros esmaltes. Dado que es una mezcla propia, debemos pesar la mezcla para saber la proporción de óxido que añadimos; en este caso va desde el uno hasta el cinco por ciento. El óxido mezclado con transparente deja aguas o irregularidades, muy bonitas una vez se dominan pero que debemos aprender a controlar.